Ay, ay, los datos personales…

Lo digo una y otra vez a todo el que me quiere oír. Mucho cuidado con tus datos personales, mucho cuidado con las fotos que subes a las redes sociales, mucho cuidado con lo que dices en twitter, mucho cuidado con lo que escribes en un correo…

Algunos me hacen caso y otros no. Estos últimos seguro que piensan que exagero o que tengo algún desorden mental, una especie de complejo de persecución. Ojalá fuera tan competente como Juan Fernández, que ha publicado en elperiodico.com su artículo llamado “La huella imborrable”, cuya lectura recomiendo y del que quiero destacar los siguientes puntos:

• La mayoría de los medios de borrado de que disponemos en los ordenadores no borran realmente la información sino que borran su índice en una tabla de referencia.
• Podemos borrar los emails de nuestro buzón, e incluso pedirle al destinatario que borre el que recibió de nuestra parte. Pero eso no hará que su contenido desaparezca. Yahoo y Gmail guardan copia durante 18 meses de los emails borrados.
• Los móviles son como un concentrado de datos personales. Nos los pueden robar y no tenemos puesta clave de protección, pueden enviar mensajes por nosotros. Ojo al bluetooth y al wifi, y ojo a aplicaciones como Wassap, que no cifra los mensajes.
• El GPS de nuestro móvil permite a su vez saber dónde estamos nosotros.
• La Comisión Europea pretende ofrecer respuesta a demanda de algunos ciudadanos a que se borren sus datos de internet mediante una directiva que dará rango legal al Derecho al Olvido.
• Han surgido algunas empresas especializadas en ayudar a recuperar el anonimato en internet, como www.salirdeinternet.com.

No sé por qué, pensaba que ya había hablado de los datos personales que quedan en nuestro ordenador, y de cómo pueden ser el objetivo de algún desaprensivo que, mediante un troyano, se cuele en nuestro sistema y busque información relativa a bancos, domicilios, otros contactos a quienes saquear, etc., etc., etc.

Una utilidad gratuita que puede ayudarnos a evitar el problema es ccleaner de Piriform. Limpia nuestros datos temporales, vacía nuestra papelera, borra las cooquies, los historiales e incluso es capaz de realizar un borrado seguro del disco mediante el método Guttman de 35 pasadas. Este método hace extremadamente difícil conocer el contenido original del disco duro.

¡Ah, un último aviso! Cuando digo borrar es borrar, así que mucha atención a lo que hacéis. Perderéis los historiales e incluso esa configuración que hiciste para ver la programación de los canales de televisión que más te gustan. Así que precaución.

Pensad que vosotros sois los únicos responsables si borráis algo que no queríais borrar.

Saludos.