La pandemia de COVID-19 obligó a muchas empresas a replantearse su estrategia en lo referente a la digitalización. Pero curiosamente, lo que llegó como algo casi impuesto por las circunsatancias, ha demostrado con creces que es el camino a seguir. Un ejemplo claro es el valor añadido que supone para los empleados poder conciliar mejor su vida personal y la laboral. Podríamos citar también las ventajas medioambientales de reducir el número de desplazamientos que se producen a diario en nuestras ciudades.
Estrategia de digitalización
Para conseguir implantar una estrategia digital, deberemos trabajar tres aspectos principales:
Cultura empresarial
La implantación de una nueva cultura empresarial siempre es un difícil obstáculo a salvar ya que las inercias existentes son muy fuertes. Además, requiere un fuerte apoyo de la gerencia: los directores deben ser los primeros y principales promotores del cambio cultural necesario.
No podremos implementar una nueva cultura si no tenemos preparados los siguentes dos puntos. Intentarlo sería como gastar una bala que nunca volveremos a tener.
Tecnología
Una de las estrategias digitales más necesarias en cualquier empresa es utilizar un ERP moderno que les permita abandonar los sistemas manuales, o basados en herramientas como Excel, o incluso otros ERP antiguos (legacy) que ya no son capaces de evolucionar y adaptarse a las necesidades actuales.
También es fundamental dar el “salto” a la nube. Hay que olvidarse de los discos duros alojados en nuestros propios servidores, a los que tenemos que realizar backups regularmente para estar seguros de que nada se pierde y donde se pueden borrar datos por error.
Las comunicaciones unificadas, que nos permiten llevar nuestro puesto de trabajo a cualquier lugar del mundo sin perjuicio para nosotros o para nuestro cliente es otro proceso fundamental.
Procesos y procedimientos
Si bien es posible que los procesos de la empresa no varíen, sí que es posible que desaparezcan unos (realización de backups) y aparezcan otros (creación de carpetas compartidas en la nube). Lo que seguro que cambiará, sobre todo si se implanta un ERP es el procedimiento que describe las tareas y pasos a realizar a lo largo de un proceso.
Y esto es por dos razones. La primera nos dice que siempre es mejor adaptarnos nosotros al ERP que lo contrario. La segunda es que al revisar un procedimiento de trabajo casi siempre aparecen actividades que no son capaces de sobrevivir a la regla de los cinco “por qué” (5 why?).
Consulting o Interim Management
Una colaboración de Consultoria o un contrato de Interim Management son dos opciones para dar ese empujon definitivo que necesita para llevar adelante su Estrategia de Digitalización.